Gracias a la generosidad de aquel momento de Alfonso X, tenemos esta Iglesia de Santa Ana, considerada la Catedral del Barrio de Triana. Recordad que el Rey tenía una dolencia en un ojo y le promete a Santa Ana, que si se lo cura levantará una iglesia dedicada a su nombre. El milagro sucedió y la parroquia se levantó.
De ésta primera época, se destacó la portada lateral de la nave del Evangelio e hicimos referencia a esa arquitectura híbrida del siglo XIV, donde elementos románicos, góticos y mudéjares se mezclan en uno solo.
Esta iglesia es un referente para toda Sevilla, pues en su interior se conservan obras de alta calidad. Destacamos el Retablo Mayor realizado en 1542, donde trabaja el pintor flamenco Pedro de Campaña. Pudimos contemplar sus pinturas y la gran restauración llevada a cabo por IAPH. Interesante igualmente, el grupo escultórico de Santa Ana y la Virgen, de la segunda mitad del siglo XIII, retocadas en el siglo XVII por Francisco de Ocampo. En la cabecera de la nave derecha el Crucificado del Socorro de Andrés de Ocampo y las pinturas murales de Domingo Martínez de 1740. En el muro de la derecha los lienzos del Maestro de Moguer, que no pudimos ver porque se encontraban en la exposición temporal de la Catedral. En el trascoro la pintura de la Virgen de la Rosa del conocido pintor Alejo Fernández, entre otras muchas obras.
Curiosa fue la historia que os conté acerca de la lauda sepulcral y la historia del conocido "negro de Triana", pateado por todas las casaderas de la zona.
En esta ocasión, yo llevaba mi nueva cámara reflex, por lo que la calidad de la imagen puede que les resulte algo mediocre, ya que aún sigo aprendiendo y familiarizándome con ella. Desde entonces, comencé a realizar por semanas fotografías, alternando los días de los grupos. En las próximas entradas subiré fotos de los grupos del martes y del miércoles. De momento, ahí va esta del jueves día 20 de Enero de 2011.
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